Si hay algo que puso en evidencia la pandemia del covid-19 es lo mal preparadas millones de personas y hogares para afrontar una emergencia de esta magnitud, lo que no solo las obligó a pedir ayuda, sino que llevó al gobierno a decretar alivios a las personas para atender sus obligaciones con los bancos o dando plazos de gracia para el pago de los arriendos.
Con las empresas viendo sus operaciones y ventas fuertemente reducidas y con una incertidumbre sobre una reactivación completa, hemos observado miles de despidos y reducciones en los salarios, por lo que la reflexión mas frecuente en muchos casos es ¿por qué no ahorré para momentos como estos?
¿Qué se considera una Emergencia?
Sea un momento como el actual o cualquier otra situación o eventos que de presentarse pueda tener un fuerte impacto en el flujo de caja puede catalogarse como emergencia.
Una emergencia es un evento imprevisto que nos demanda un esfuerzo financiero no presupuestado, por ejemplo, una reparación del auto, de la casa, una enfermedad en la familia o un periodo sin ingresos o una reducción significativa del ingreso como lo hemos observado recientemente.
¿Pero cuánto deberíamos tener disponible?
Esta estimación varia para cada persona o familia, dado que el tamaño de nuestro fondo de emergencias se estima en función del tamaño de nuestros gastos mensuales, y se recomienda que sea de por lo menos 6 meses de gastos básicos.
De esta manera el primer paso es tener un presupuesto en el cual podamos categorizar los gastos dependiendo de si son fijos o variables, es decir cuales gastos no se pueden reducir y aquellos en los cuales si podemos hacer ajustes o eliminarlos.
¿Cómo empezar a construirlo?
En cuanto más pronto se logre construir este ahorro esto traerá mayor seguridad a tus finanzas personales, sin embargo, si los gastos básicos son altos, construir el fondo de emergencia tomara más tiempo, lo importante es establecer una meta de ahorro mensual para este objetivo y hacerlo prioridad incluso antes de invertir o pagar tus deudas.
Puedes ahorrar esto en tu cuenta de ahorro, o un fondo de inversión colectiva liquido que no te exija permanencias y que sea de baja volatilidad.
Es por esto, que tener un ahorro que sea una provisión suficiente es fundamental en el proceso de planeación financiera.